Panecillos blanditos para la merienda del cole

  

Vi una receta (cocina con Xena) de unos panecillos que tenían muy buena pinta y un día que encendí el horno me acordé que esta receta la tenía en “recetas pendientes”. La tenía en recetas pendientes porque me daba la sensación de que eran panecillos como si fueran pan de leche, bollitos que mi hijo no puede comer porque es alérgico al huevo. Asique me puse con mi hijo a hacer estos estupendos panecillos los cuales me han sorprendido gratamente. Son unos panecillos blanditos, blanditos, con muy buen sabor… y buen olor… me encanta el olor del pan recién hecho, y este huele genial. Espero que os animéis a hacerlos.

 

Ingredientes:

400 ml de leche sin que esté fría

600 gramos de harina de fuerza (con la normal de trigo también quedan bien, yo de hecho, tenía sólo 400 gramos de harina de fuerza y el resto puse de trigo normal)

50 ml de aceite de oliva suave

2 cucharaditas de sal

Un sobre de levadura de panadería o un taco de levadura prensada

 

Vertemos la leche a temperatura ambiente junto con el aceite en el vaso de la thermomix y lo mezclamos 2 minutos a 37º, velocidad 1. Pasado el tiempo, añadimos la levadura al vaso y mezclamos para que se deshaga bien 10 segundos a velocidad 2. Ponemos a thermomix a velocidad 2 sin temperatura y vamos vertiendo la harina poco a poco y entre medias introducimos la sal. Cuando hayamos introducido toda la harina vamos aumentando la velocidad de la máquina para que se mezcle todo bien.

Cuando se haya mezclado pondremos la masa en velocidad espiga, vaso cerrado 2 minutos.

Ponemos la masa en un bol y lo tapamos con un paño limpio o papel film, en un lugar cálido y sin corrientes de aire para que la levadura haga su trabajo y fermente. La masa estará lista cuando doble su volumen.

 

 
 

Una vez fermentada la masa la ponemos en una superficie enharinada y hacemos dos rulos con ello. Cogemos un cuchillo y hacemos los cortes del tamaño que queramos los bollitos, los hacemos unos cortes en la parte de arriba para que queden más bonitos.

Yo no los he moldeado ni los he hecho forma de bollitos, porque los hizo mi hijo y los quiso así, que parecieran chapatas y panes de hamburguesa, pero para gustos… colores.

Una vez formados los panecillos los dejamos en la bandeja del horno, con papel vegetal de hornear tapados con un trapo limpio de cocina durante media hora.

 

 

 

Precalentamos el horno a 180º para que cuando haya pasado esa media hora de reposo de los panes los podamos introducir en el horno. Los horneamos durante 25 minutos y… a comer pan del bueno!!!

 

 
 

 
 

Para conservarlos yo los he metido en bolsas de congelar y así tener panecillos durante más tiempo. Dejé de todas formas unos cuantos en mis famosas latas de las galletas de mantequilla, y ahí se conservan estupendamente durante varios días.